LECCIONES DE BORDADO 2: Bastidores

¿Para qué sirve un bastidor y cómo usarlo para bordar?

Un bastidor es una herramienta esencial para cualquier persona que practique el bordado, ya sea principiante o experimentado. Su función principal es mantener la tela tensa y en su lugar mientras se trabaja, lo que facilita la creación de puntadas precisas y uniformes. Además, ayuda a evitar arrugas y pliegues en la tela, asegurando que el diseño final sea limpio y profesional.

¿Qué es un bastidor?

Un bastidor consiste en dos anillos, generalmente de madera o plástico. El anillo interior es sólido y ligeramente más pequeño, mientras que el anillo exterior es ajustable, permitiendo que se sujete firmemente alrededor de la tela. Existen diferentes tamaños de bastidores, adaptándose a distintos proyectos de bordado. Algunos bastidores también vienen con soportes o bases, permitiendo que las manos queden libres para trabajar.

¿Cómo usar un bastidor?

1. Seleccionar el Bastidor Adecuado:

   • Elige un bastidor que sea adecuado para el tamaño de tu proyecto de bordado. Si el diseño es pequeño, un bastidor de 10 cm puede ser suficiente. Para diseños más grandes, puedes necesitar un bastidor de 20 cm o más.
   • La tela debe de ser mayor que el diámetro del bastidor y es recomendable que el bastidor sea mayor que el área que se va a bordar, para no estar continuamente desmontando el bastidor y moviendo la ela.
     

2. Preparar la Tela:

   • Lava y plancha la tela antes de montarla en el bastidor para eliminar cualquier arruga o encogimiento posterior.

3. Montar la Tela en el Bastidor:

   Antes de montar la tela en el bastidor, recomendamos forrar el aro interno sobre todo si el bastidor es de madera. Con los de plástico no es necesario hacerlo. Se puede forrar con una cinta de algodón, superponiéndola un par de vueltas y fijándola fuerte. Se debe de asegurar los extremos con unas puntadas, para que la cinta no se mueva.
   

   • Separa los dos anillos del bastidor aflojando el tornillo del anillo exterior.
   • Coloca la tela sobre el anillo interior. Asegúrate de que la parte del diseño que vas a bordar esté centrada sobre el anillo.
   • Coloca el anillo exterior sobre la tela y el anillo interior, presionándolos juntos. Asegúrate de que la tela quede tensa pero no demasiado estirada para evitar distorsionar el diseño.
   • Aprieta el tornillo del anillo exterior para asegurar la tela en su lugar.

4. Ajustar la Tensión:

   • Una vez que el bastidor esté asegurado, verifica la tensión de la tela. La tela debe estar lo suficientemente tensa para que cuando la toques, produzca un sonido similar al de un tambor. Ajusta el tornillo si es necesario para lograr la tensión adecuada.

5. Comenzar a Bordar:

   • Con la tela asegurada en el bastidor, puedes comenzar a bordar. La tensión proporcionada por el bastidor facilita la inserción y extracción de la aguja, permitiendo crear puntadas uniformes y precisas.
   • A medida que trabajas, puede ser necesario ajustar la tela o mover el bastidor si el diseño es grande. Simplemente afloja el tornillo, reposiciona la tela y vuelve a tensarla.

Consejos Adicionales:

• Mantén el bastidor limpio: La suciedad o el aceite de tus manos pueden transferirse a la tela, así que asegúrate de trabajar con las manos limpias y, si es posible, cubre las áreas del bastidor que no estás utilizando con un paño limpio.
• Almacenamiento adecuado: Cuando no estés usando el bastidor, afloja el tornillo para evitar que la tela quede estirada permanentemente.
• Uso de bastidores con soportes: Si planeas trabajar en proyectos grandes o detallados, considera usar un bastidor con soporte. Estos permiten trabajar con ambas manos y reducir la fatiga.

El uso de un bastidor en el bordado no solo mejora la calidad del trabajo, sino que también hace el proceso más cómodo y agradable. Con la práctica, encontrarás que montar la tela y ajustar el bastidor se convierte en una segunda naturaleza, permitiéndote concentrarte en la creatividad y el disfrute del bordado.